Pues eso, que cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar. Y no es por recordar viejos refranes, que todavía gracias a dios no estamos para eso, sino por hacer mención a cierto virus que pulula por el ambiente. Las últimas noticias con las que contamos es que se trata de un virus que hace tender a la paternidad y últimamente se propaga con gran rapidez. El hecho de que sea yo quien hable de virus de paternidad, a simple vista, carece de novedad, sin embargo, muchos de los que sigan leyendo lo entenderán.
Imitando a cierto personaje mediático que se dedica a anticipar noticias, no sin antes señalar tímidamente a los autores, aunque eso sí, haciendo gala de no haber nombrado a nadie, diré que éste virus ha emprendido una rápida marcha a lo largo y ancho de España. Pues sí, se propaga rápidamente, y tenemos constancia de que ya ha llegado al norte peninsular. ¿Que es lo que estoy diciendo? nada, quien quiera que lo interprete, ¿de quien estoy hablando? de nadie, quien quiera que lo imagine.
A propios y extraños: probablemente ésta breve noticia no la habrán entendido algunos, unos por no conocer a los implicados, otros por falta de rapidez mental. Lo único que puedo decir, esto sí, a ciencia cierta, es que cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar; y es que tenemos noticias de que ese virus está por propagarse, y son zonas propicias según el clima el altiplano y Loma Verde, así que cuidadito.
Desde aquí, a los futuros papás, nuestros mejores deseos en ésta nueva y larga andadura, que esperemos os llene de felicidad. Besicos norteños.
